2 de febrero de 2009

Mamá Concho

A mi abuela, la única mujer
mayor que he querido

Las luces de la avenida se encienden: deben ser las seis y media. Mamá Concho ha terminado de murmurar sus oraciones y, arrastrando sus patas de gorila, va camino a encender el televisor de la sala de estar. ¡Ay, Chavo!, se quejará sin darse cuenta de que cuatro indios han secuestrado sus viejos zapatos -víctimas inocentes de mi soledad- en los confines de la alfombra y el primer cajón de la mesa del teléfono.

Después decía: si sigues portándote así me voy a mi casa. Y yo bajaba a tomar leche en polvo con nata y chocolate en unos pocillos inmensos de porcelana blanca. No me dejes, Mamá Concho; no me dejes que hay apagón y papá todavía no llega. Y remojaba mi pan en su café de segunda mano, imitándola y sonriendo como un mono para que no dejes de quererme aunque Miguel se porte mejor que yo.

Cuéntame cómo es el ángel de la guardia que se esconde bajo mi cama, Mamá Concho. Tenía miedo: tres gatos se habían escondido en el balcón y me asustaron a la hora de dormir. Qué tonto fui, si bastaba con lavarse los pies para curarse del susto.

Mi hermana dice que Mamá Concho olía a bizcochos de chocolate con mantequilla pero, por más que lo intento, yo sólo consigo evocar un olor morado de mes de octubre y pies hinchados y te-regalo-una-pelotita-de-goma. Y también ese olor a jarabe y alcohol de la casa marrón de escaleras rojas y muebles de acero inoxidable donde fuimos a verte todos los primeros días del último verano.

Ahora el sol de veinte veranos es más fuerte y lo aprovechas para comer esos helados D’onofrio que ella no te dejaba comprar, niño travieso.

Lima, 1 de febrero del 2009

14 comentarios:

Angela Espinoza Hermoza dijo...

Las abuelas, casi siempres la figura más tierna que uno recuerda de la niñez...

Alejandra Macedonia dijo...

Que lindo... sí pues, qué importa si el recuerdo es claro o difuso... uno simplemente recuerda que nos quisieron mucho... Así son las abuelas... (aunque la tuya quiso un poco más a Miguel, jeje. Esa parte es buena)

Muchos besos
Ale

Anónimo dijo...

Mi abuela volvió en el rostro de una biznieta suya. Me es más fácil tributarla y recordarla.

Juanito el caminante dijo...

La abuela... la mia esta renegona pero es un amor... siempre me quedaba a dormir en su casa...

Cocina riquisimo... el mejor caucau de todos... de lejos...

Keep walking

El Chico Nube dijo...

Pues sí, son recuerdos muy lejanos y difusos. Hace ya veinte años que falleció mi abuela. Esto es lo que recuerdo. Y cuánto la quería.

Unknown dijo...

Amo con adoración a mis abuelos, me encantó el post tengo la divina suerte aún de tenerlos conmigo espero que sea por mucho tiempo mas


bsos de esposa primeriza

Anónimo dijo...

Hace un año que se fue la última, la necesidad de cada uno de los 4 se incrementa conforme pasa el tiempo... lo bueno, es que conforme pasa el tiempo me voy acercando donde están.

Nos leemos.

Damian dijo...

a mi ya solo me queda un par :(
mis abuelos paternos

Un chico de Lima dijo...

Las abuelitas son lo máximo...

Kelly dijo...

Me encanto tu relato, que dulce. Yo no tengo abuelos por ningun lado..a lo mucho hace muchos años conoci a mi abuela, pero debo haberla visto 2 o 3 veces, por tanto tengo vagos recuerdos de ella...lo mas claro que me acuerdo, fue cuando se murio porque habian correrias en la casa y mi mama tenia que viajar junto a unas tias para ir al funeral. :(

ando... dijo...

Vivo con mi abuela, cocina delicioso y es muy chapada su criterio, no lo cambia por nada, igual que yo, no la cambio ni a balas

Dolores dijo...

Ayyyy CN me emocioonas!
jajajaa......mi abuelo quiere ser el dictador pero mi mama no lo deja...y mi abuela es hipocondriaca.

Te haz dado cuenta que siempre renegamos de nuestros padres pero nunca de nuestros abuelos???

Besitoooooos!

Lola P.

La Gata Schrödinger dijo...

Wena forma de llevarme dentro de tu cabeza. Así da ganas de leer

FabuMona dijo...

Nostálgico post, ChicoNube.
Mi abue (la única que me queda) ahora se encuentra tras la cortina del alzheimer y desde ahí nos vé por ratos, y se me ocurre que su visión debe ser como las colchas hechas en patchwork, puros retazos.
Soleados saludos!