Hace unos días una amiga me escribió: "se acaba este 2008 y estoy más vieja y sola que en el 2007". La idea me hizo un nudo en el estómago porque me siento más viejo y más solo que nunca. Los amigos que frecuento son tres o cuatro. Los demás quedaron en el camino, en medio de este encierro involuntario.
Las paradojas de la vida: en la búsqueda de una relación seria me he quedado solo. Cansado de que me rompan el corazón decidí hacer las cosas bien. Con calma. Con algo de sabiduría. No sufrir ni hacer sufrir gratuitamante. No más melodramas. Pero fracasé. He terminado sumergido en mí mismo. En más de lo mismo. Y me estoy ahogando.
El 2008 se acaba para mí esta noche. Mañana a primera hora salgo de viaje sin mayores expectativas que olvidar que aún faltan seis días para que acabe el año. Ojalá y no llueva en el camino.