28 de noviembre de 2008

Sincera confesión

Señor Juez:

Soy egocéntrico, depresivo, manipulador, introvertido, ansioso, sarcástico, débil, contradictorio, posero, tímido, obsesivo, pesimista, cínico y bipolar. En suma, un imbécil.

Pero júzgueme usted.

C.N.

27 de noviembre de 2008

Adulterio

Desde hace un par de semanas vengo recibiendo tentadoras propuestas por parte de una amiga que está de paso por Lima. "Te invito unos tragos, ¿puedes?"; "Estoy en mi hotel con chelas pero se han ido mis amigas, ¿tienes ganas de tomar?"; "¿Seguro que no quieres venir al hotel? Estoy súper ebria"; "Ya estoy en mi cama pero me siento sola, preferiría tu compañía"; "Creo que nunca vas a animarte a venir. Qué joda. Tengo todo el cuerpo acelerado"; son algunos de los mensajes que he recibido.

Sé que se preguntarán: "¿Qué estás esperando, C.N.? ¡Si no la ves como dos meses!". Pues hay un detalle no revelado: mi amiga está casada. Sin hijos. Con un tipo que conozco. Y aunque ella alega que su relación no anda en un buen momento, el asunto me tiene de lo más contrariado.

Este blog está a punto de convertirse en interactivo. Comentar es cosa del pasado, estimado lector. Si algunas novelas permiten a sus televidentes decidir con quién debe quedarse el galán de turno, ¿por qué este blog no puede llegar aún más lejos?: hoy usted decide si este bloguer debe estrenarse en el difícil arte del adulterio.

VOTACIÓN

En relación con el dilema planteado líneas arriba, usted considera que el Chico Nube debe:

a) Ir. "Aprovecha al máximo su estancia".
b) Ir pero sólo una vez. "Sácate el clavo".
c) No ir. "Siempre queda el onanismo".
d) No contestar más sus mensajes. "Gánate el cielo".
e) Ninguna de las anteriores. Especificar.

La votación se cierra el fin de semana.

01/12/08. Resultados de la votación

Ganó el onanismo, con cinco votos. Las opciones a) y d) quedaron empatadas con tres votos cada una. Dos personas propusieron que me acueste con otra y una votó porque vaya al hotel pero sólo una vez. Finalmente, tres lectores comentaron pero no votaron (¿voto en blanco?).

Menos mal no tiré a la basura el encarte de ropa interior de Ripley.

25 de noviembre de 2008

Conversación en un baño de hombres

Pieza en un acto para tres actores. 
 
Tres amigos entran a un baño público. Cada uno se ubica frente a un urinario. A uno se lo escucha orinar entrecortado.
 
Amigo 1: Compadre, ¿qué haces?
Amigo 2: ¿Qué crees que hago?
Amigo 1: Cualquier cosa menos mear.
Amigo 3: Sí, es la tercera vez que te escucho orinar entrecortado. Tienes que ir al urólogo.
Amigo 2: Paso.
Amigo 1: ¡Pero si ya tienes la excusa perfecta para que te hagan un examen de próstata!
[Todos ríen]
Amigo 3: Fuera de bromas, tienes que ir a verte.
Amigo 1: Sí, no vaya a ser que arruine aún más tu pobre desempeño sexual.
Amigo 2: ¿Cómo diablos lo va a afectar? ¿Eyaculando entrecortado?
Amigo 1: ¡Vas a ser multiorgásmico!
[Todos ríen]
Amigo 3: Bueno, hablando en serio, ¿cuándo vas a ir al urólogo?
Amigo 2: Nunca.
Amigo 3: ¿Por qué?
Amigo 2: Por muchas razones.
Amigo 3: ¿Prefieres que se te caiga a pedazos?
Amigo 2: La verdad es que sí.
Amigo 3: No seas infantil, ¿qué tan malo puede ser?
Amigo 1: Sí, compadre, sólo te van a meter el dedo hasta el fondo. No creo que sea tan traumático.
[Todos ríen]
Amigo 2: No es sólo eso...
Amigo 1: ¿Qué puede ser peor que eso?
Amigo 2: ¡Que me la va a tocar!
Amigo 1: Mongolito hubiese preferido, carajo.
Amigo 3: Bueno, te la toca y qué.
Amigo 2: Que no quiero que me la toque un hombre.
Amigo 1: ¿Tienes miedo que se te pare?
[Todos ríen menos Amigo 2]
Amigo 3: Pero consíguete una uróloga.
Amigo 2: ¿Hay urólogas? ¿en serio?
Amigo 1: Pensé que se llamaban kinesiólogas.
Amigo 3: Claro que hay urólogas. ¿Ahora sí vas a ir?
Amigo 2: Pucha, no sé...
Amigo 1: ¿Y ahora qué?
Amigo 2: Es que si me la coge una chica...
[Amigo 1 y Amigo 3 escuchan atentos]
Amigo 2: ...se me para sí o sí.
 
Se escucha el ruido del flush. Amigo 1 y Amigo 3 se lavan las manos y salen del baño sin hacer comentarios, moviendo la cabeza. Amigo 2 continúa en el urinario. El público aún puede oirlo orinar entrecortado.
 
[Nota: Todos los personajes que aparecen en esta pieza alegan ser ficticios]

24 de noviembre de 2008

Odio a los pitufos

Ayer, como todos los domingos, fui a almorzar a la casa de mis papás. Todos habían ido a Chaclacayo a conocer al hijo de una prima y sólo estaban mi papá y mi sobrino de tres años. Compramos pollo a la brasa, un litro de helado y un chocolatito para Gonzalito.

Durante el almuerzo mi sobrino estuvo insoportable: derramó la gaseosa, se subió a la mesa, jugó con el pellejo del pollo, tiro las papas al perro. En fin, todo lo que suele hacer cuando no está su mamá cerca. Cansado de sus malcriadeces le dije molesto: "Gonzalo, cállate y come". Santo remedio. Terminó su plato en silencio, cogió su chocolate y se escondió en el jardín.

Por supuesto, apenas llegó su mamá, mi sobrino corrió a su encuentro con un llanto contenido.

-Mamá, C.N. es malo -le dijo.
-¿Por qué, mi amor? -preguntó mi hermana.

Envalentonado, mi sobrino me buscó con la mirada. Gran error, le lancé una mirada amenazante dándole a entender que estaba totalmente dispuesto a delatarlo.

-¿Qué te hizo tu tío? -insistió mi hermana divirtiéndose.
-C... N... es... malo... -tartamudeó Gonzalo-, me compló un chocodate bien chiquitito, mamá.

19 de noviembre de 2008

Ensayo sobre la ceguera

Hay momentos en la vida en los que elegimos no ver. Como cuando el dolor es muy grande. Porque ver duele. Arde. Quema. Entonces, de manera casi inconsciente, cerramos los ojos. Simplemente pasa. Me pasa.

Para cuando Rebeca me dijo que su tía le había alquilado un departamento para que estudie por las tardes, yo ya había perdido la vista. Lo asumí como todo lo de ella: sin demostrar emoción alguna que me pusiera al descubierto. Poco importó que nunca me hubiera hablado de esa tía ni que su historia no tuviera sentido en una familia llena de dificultades económicas. Más fácil era no preguntar.

El departamento estaba ubicado en San Borja, tenía sólo una habitación y estaba amoblado. El mismo día que me habló de él fuimos al Jockey Plaza a comprar vajilla, ropa de cama, utensilios de cocina, útiles de aseo personal e implementos de limpieza. También un televisor de 21''. Luego fuimos al departamento a estrenar nuestras sábanas. Con sólo 17 años tenía un departamento para mi novia y para mí.

Hasta hoy no sé con qué dinero compró todas esas cosas. Es probable, además, que nunca se lo haya preguntado. En aquellos días me bastaba con saber que teníamos un refugio lejos de su familia y de la mía donde podíamos jugar a ser felices. De lunes a sábado, de dos a nueve.

Una tarde encontramos un tipo adentro encerando la sala. Él, a diferencia nuestra, pareció no sorprenderse con la visita. Rebeca, visiblemente nerviosa, me dijo que era un amigo que la ayudaba con la limpieza a cambio de utilizar el estacionamiento. Ambos se encerraron en la cocina y, al cabo de un rato, el tipo salió, se despidió y se fue. Una vez más, no dije nada. Pero la última vez que vi a Rebeca, años después, planeaba casarse con él.

18 de noviembre de 2008

Sintaxis femenina

El domingo salí a tomar un café con una amiga a la que no veía hace varios meses. Hoy me escribe:
 
C.N., quiero hacerte una pregunta: si tú y yo nos vemos después de un buen tiempo, como el otro día, ¿me invitarías a salir o algo asi? No sé si me explico.
 
Como le tengo mucha confianza (y no le entendí mucho), repregunté:
 
Ayúdame a entender tu pregunta, quieres saber...
 
a) ¿Si te invitaría a salir si yo fuera un chico X (en abstracto)?
b) ¿Si yo te invitaría a salir (futuro próximo)?
c) ¿Si yo quiero invitarte a salir (presente)?
 
Su respuesta fue: "d) Todas las anteriores".
 
Nunca dejará de sorprenderme la capacidad de las mujeres para aglutinar tantos significados en un mismo significante.

16 de noviembre de 2008

Sábado sin gloria

Matrimonio sin suerte el de ayer. Ximena, mi ex, y su novio también habían sido invitados. Me salaron la fiesta.

No pude salir a matar, como recomendó CeCiCa. Las pocas chicas que llamaron mi atención estaban casadas o habían ido en pareja. Terminé de refugiado en la mesa de unos amigos, estratégicamente ubicada al lado de la barra.

Al final de la fiesta, la novia de un amigo a la que veía por primera vez me pidió permiso para tomarme una foto.

-Realmente eres todo un personaje, C.N. -se justificó-. No quisiera irme sin una foto tuya.

Y me tomó unas tres fotos.

Hasta ahora no resuelvo si lo que esa chica me dijo ha sido un cumplido o, como temo, un insulto.

12 de noviembre de 2008

Pa' bravo yo

No suelo poner la radio. La odio. Desde Raúl Vargas hasta Carlos Galdos y su mañana maldita. Pero no man is an island y, como reza la publicidad, la radio está más cerca de la gente. Así que, ni modo, se me impone como banda sonora de cada viaje en taxi, combi o colectivo que realizo por Lima [el ipod, en estos casos, sirve de poco: el volumen suele ser tan alto que competir es una tarea inútil].
 
Hace unos días, de regreso a mi casa, escuché por primera vez uno de los programas más bizarros del dial: "El show de Jeta Jeta y los Bravo-pedidos" [sic]. La "gracia" del programa está en atender pedidos musicales de los oyentes con la voz de la parodia que hacen de Julio César Uribe en "El especial del humor". El humor, como entenderán, es involuntario. Porque es difícil divertirse con un tipo que repite en cada llamada: "métete con blanco, métete con cholo, métete con chino... pero no te metas con negro sin chamba". Bueno es culantro pero no tanto.
 
Por lo demás, algunas llamadas son desconcertantes:
 
-Habla, blanquiñoso -contestó el bravo Jeta Jeta.
-Hola Jeta Jeta -respondió una voz menuda.
-Déjame adivinar, blaquiñosa: ¿tienes 15 añitos?
-Tengo 10 añitos, Jeta Jeta -dijo diforzadamente la niña.
-Bueno, blanquiñosa, ¿cuál es tu bravo-pedido?
-Quisiera escuchar "Amanecí contigo" de Hildemaro -pidió la niña.
 
Y le dedicó la canción a su mamá y a su papá, como en un concurso de Nubeluz.
 
Lo peor es que nadie pareció soprenderse con el dislate. Por eso nunca enciendo la radio.

8 de noviembre de 2008

Antiácido

-Doctor, ¿qué tal mis pruebas? ¿ingresé? -no pude evitar la broma.
-Veamos -dijo el médico sin esbozar sonrisa-: hematíes, bien; hemoglobina, bien; hematrocitos, bien...

Yo no entendía nada de lo que hablaba pero me sonaba esperanzador.

-Leucocitos, 5,730 -siguió-; eosinófilos, 9%...

Aquí se detuvo un momento. Garraspeó. Luego siguió leyendo. Yo morí y volví a nacer en ese breve lapso.

-Basófilos, blastos, mielocitos, metamielocitos: todos cero -continuó.
-Pobres, los van a castigar -volví a bromear.

Pero al médico no parecían hacerle gracia mis comentarios.

-Abastonados, segmentados, monocitos, linfocitos: correcto -concluyó-. Todo parece andar bien.

"¡¡¡Estoy cureeedo!!!", grité para mis adentros para no enojar más al médico. Podría recetarme un supositorio en venganza.

-Más bien, el resultado de la otra prueba sobre enfermedades infecciosas ha salido "indeterminado" -agregó luego.
-¿Indeterminado? -me encogí de hombros con la sensación de haber sido traicionado por la ciencia.
-Quédate tranquilo, es probable que no sea nada. De todas maneras, te estoy recetando unas pastillas por unos días.
-¿Por tiempo indeterminado? -pregunté con mala leche.
-No, por diez días -respondió muy serio-. Y también vas a tomar ACI-TIP.
-¿Qué es eso?
-Un antiácido -me explicó con una sonrisa burlona.

El tratamiento resultó menos duro de lo que temí. En todo caso, ya saben a quien culpar si empiezo a escribir distinto.

6 de noviembre de 2008

Suerte aftosa

Ayer, finalmente, fui al médico. Su diagnostico presuntivo: estomatitis aftosa. Ordenó dieta fría y pruebas de laboratorio. Y, sobre todo, evitar el estrés. Siguiendo la prescripción médica pasé la tarde en cama, viendo películas y comiendo helados. Nada mal para estar enfermo.

Pero hoy un amigo me devolvió a mi nube con su correo:

"La estomatitis aftosa una enfermedad viral contagiosa que afecta a los animales (vaca, cerdos, cabras y ovejas), causando fiebre y ampollas en la boca y la piel. Sólo la transmiten los animales (nunca entre las personas). En las personas se caracteriza por: dolor de cabeza, faringitis y apatía, y tras unos días surgen ampollas en la piel (dedos, palmas de las manos, plantas de los pies). Surgen aftas en la mucosa de la boca. Se recomienda el aislamiento o sacrificio de animales o reses enfermos".

"Eso te pasa por salir con gordas", agregó en referencia a mi ex.

Yo sólo espero que el sacrificado no sea yo.

4 de noviembre de 2008

Broken words

Dos días con migraña. Con insomnio. Con sangre en la boca. Sin fuerzas para escribir sobre avenidas, extraños, alcohol, madrugadas. Para narrar el frío amanecer desde un balcón ajeno buscando al mar.

Fin de semana de mierda.

[Sí, everything is broken]

2 de noviembre de 2008

Broken lines

Anoche encontré una pareja de ancianos en el pasaje que conduce a la calle donde vivo. Aparentaban unos sesenta años. Pero estaban sentados bajo un poste sin luz, sobre un sardinel, besándose como chicos de quince.

No pude regalarles una sonrisa. Demasiado tiempo buscando. Soñando. Naufragando.

Seem like every time you stop and turn around, something else just hit the ground.