Un corredor.
Dos corredores.
Tres corredores.
Yo camino. Avanzo sin dirección entre la densa neblina y descubro que mi indecisión comienza a trascender lo trascendente. To be or not to be. Pero por dos. Y es que: ¿ser o estar? Menos mal que no estudiaste filosofía, C.N.
Me sonrío y enciendo un cigarrillo. La neblina retrocede con la primera bocanada de humo. A lo lejos un disco blanco asoma insignificante.
Segundo cigarrillo: siento el aguijón. Entra por el hueso frontal del cráneo y se extiende como un relámpago por toda la cabeza paralizándome. Es un dolor helado, agudo y chirriante. Un minuto después el malestar se desliza a la zona occipital. Me siento pequeño, vulnerable. Insignificante.
Camino. Ya no fumo.
Un anciano corre descalzo por el malecón. Luce descuidado. Difícil decidir si está loco o no. Pero es curioso cómo puedo sentirme más cercano de este pobre viejo que de los otros corredores. Cuando pasa a mi lado lo saludo y él me devuelve el gesto con una venia y una sonrisa.
La neblina avanza lenta y en dirección al sur. Yo también. Deben ser las siete u ocho de la mañana. Hoy no tengo ideas claras, sólo impulsos: es mi cuarto día con migraña.
De los regalos su etiqueta
Hace 4 años.
16 comentarios:
yo he corrido al lado de ese tío de descalzo. hace como dos años. qué paja.
Si del que hablas es quien creo que es, también va sin polo :P
Chico Nube Migraña... Chico Nube Migraña...
A mi me ayudaba trotar en las mañanas, sobre todo porque despejaba las ideas reestupidas de la cabeza...
Me llegaba que los viejitos y otros corredores me pasen...
Siga caminando Nubemegaman pero Chico...
por donde vivo ni correr se puede...
saludos chico nube con suerte.
la migraña es feíta..
me gustó el relato..muchos puntos, eso me gusta :)
beso!
migrañan mortal.. suerte que yo no sufro de eso!
pucha, puchito caminante y reflexivo es la voz xD
¿Y qué tal si hiciste una mala combinación de trote, descanso y cigarro?
Hay ciertas cosas a eliminar de tu sistema, mi estimado.
Corres y fumas? Woooow, eso nunca lo había escuchado. Será que eso puede estar molestando más al demonio de tu migraña. Un abrazo.
Yo no corro ni troto. Camino por el malecón sin ningún interés deportivo, sólo con la intención de fumarme un cigarrillo.
al principio cuando llegue por aca salia a caminar por el malecon, pero ya no lo hago hace mucho tiempo, creo que voy a ir uno de estos dias como leer algo.
Nos leemos.
Yo vivo en el Malecón de la reserva :O
Unos traguitos, y se acaba la migraña...
Las migrañas son espantosas. Pueden mandar al diablo cualquier plan.
Yo las sufro desde los trece, son la generosa herencia de mi madre. Es la compensación por no parecerme nada a ella.
saludos.
SI al caminar por el malecon de la reserva, NO al pucho!
ya esta haciendo frio en Limita?
No, el sol no deja de asomarse, Iziar.
Dios, recupérate... ya nos vemos.
Nos leemos.
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